El régimen de Nicolás Maduro desconoce sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos. En el país se persigue por razones ideológicas, se discrimina, se penaliza al opositor y a todo aquel que ose expresar sus ideas, más aún al que proteste, Leopoldo López y las decenas de estudiantes hoy en día en cárceles que dibujan al régimen, totalitario y excluyente, corrupto e ineficaz.